miércoles, 23 de enero de 2013

la mujer que quiero tener "capitulo 4"


VECINOS



 







Alce los ojos para ver al hombre que tenía delante de mí del cual me hablaba con voz seductora. Pude notar que no estaba solo.
-Hola-saludo sarcásticamente Isabella sentí las ganas de correr a donde ella y gritar lo q estaba sucediendo.
Isabella seguía siendo ella misma, pero no la que yo conocía esta un poco más corpulenta y no era ni lo más bella que fue antes. En otras palabras estaba gorda como si estuviera apunto de reventar, su cabello comenzaba a tener cana y su rostro comenzaba a mostrar pequeñas arugas impresionantes para tener más de 30.
Nick-grito Kyle a mi espalda.
Yo estaba en shock, aun mi cuerpo no reaccionaba y mi mente ponía las piezas de rompecabezas en su lugar. Mire a Isabella, pero ella me miro con frialdad, con asco y desagrado.
-¿Esa era Isabella?- me pregunte.
-Si-dijo me vocecilla.
-¿Ella es mi amiga?- pregunte a mi vocecilla ya que no sabia que pensar.
-Quien dijo que lo fue-respondió molesta por mi pregunta.
Yo disimule el momento en mi mente e intentaba demostrar tranquilidad y serenidad. Aparte mi vista de Isabella.
Mi corazón parecía a punto reventar y sentía las manos sudorosas, mis ojos estaban puestos en los hermanos. Quienes se daban la mano de forma contarte y seria.
Cuando los hermanos notaron mi presencia y la de la gorda nos presentaron.
-Hermano ella es mi colega, la cardióloga Sophia Carrión-dijo con orgullo.
-Hola-susurre.
-Ella es mi prima Isabella y mi hermano Mayor-explico Kyle.
No dije nada. Aparte mi mirada de los hermanos y le sonreí a Isabella, pero ella mi miro con fastidio.
Volví a mirar los hermanos con horror.
-Nos podemos sentar-murmuro la gorda que ya comenzaba a desagradarme.-tengo hambre.
París soltó una risa nerviosa que me hizo sentir mas nerviosa que antes.
El mesero se nos acercó.
-¿Que desean tomar?-pregunto el mesero.
-cerveza -respondió Kyle.
-Margarita-respondió Isabella.
-vino-respondió Paris.
-Capuccino-respondi, pero me arrepentí-no, mejor Vodka.-respondí.
Todos los presentes me miraron de la forma mas extraña y yo me encogí de hombros.
El mesero se fue y solo se quedo el silencio fúnebre.
-¿De donde se conoces?-pregunto Isabella con malicia.
-Desde la universidad-respondió Kyle.-ella estudiaba lo mismo que yo, pero nunca fuimos amigos hasta que empezamos a trabajar.-explico Kyle.
Puse mala cara y Kyle lo noto.
-¿Nunca salieron?-pregunto Paris curioso.
El me miraba fascinado.
-Ella nunca quiso salir conmigo su novio era don biblioteca- dijo y puse mala cara.
-¡No es verdad!-exclame molesta- lo dices por que sacaba mejores calificaciones que tu.-le espete molesta.- tu hermano pasaba su tiempo atrás de faldas. Si no fuera por mi no estaría donde esta…
Él se echo a reír
-Es verdad-admitió- ella tiene el don del control el mi.
Todos se rieron y yo lo hice. Tenia que parecer natural y no nerviosa.
Era curioso y sorprendente que Paris no se diera cuenta que era yo quien estaba delante de él. Tantos años para olvidarme.
-¿Usted tiene esposa?-pregunte curiosa.
-no-dijo negando la cabeza.
-¿Porque?-pregunto Kyle curioso.
Cuando Paris se disponía a responder llegaron las bebidas.
Cuando tuve el baso de vodka me lo tome rápidamente sin darme cuenta que Kyle y Paris me miraba.
-¿Tienes sed?-pregunto Isabella y la mire fríamente.
-No-respondí fríamente que las palabras salieron con odio.- ¿porque no se ha casado?-le pregunte a Paris dejando de mirar a Isa.
Cuando se disponía responder lo interrumpió Isabella.
-Porque mi querido primo viaja por todo el mundo buscando a una perra a la cual nunca le convenía-dijo fríamente.
-No hables así de Julieta- le regaño el a su prima.
-¿Quien es Julieta?-pregunto Kyle curioso y mirando a u hermano con atención.
-Es el amor de mi vida-respondió y casi soltaba un suspiro y mi corazón salto golpeándose contra las costillas.
-¡Él me amaba!-exclame en mi mente y casi sonrió, pero ese gesto se olvido por mi mente.
Seguía buscándome y teniéndome tan cerca de él. Me seguía amando y había dejado su vida por mí. Era mi culpa, mi maldita culpa. Isabella tenía razón para odiarme tanto.
París suspiro y poses mis ojos en la copa de champaña vacía. Sabía que nadie me observaba ya que era el centro de conversación.
-La amo desde que la conocí y no dejare de amarla, nadie podrá sustituir su lugar- explico mirando a su prima.-ella era diferente a todas las chicas, fuerte, inteligente, hermosa y de buen corazón-susurro y sentí la ganas de salir corriendo de ese maldito restaurante.
Sus palabras sonaban sobrias y molesta por alguna razón que nadie seguía.
Nadie dijo nada y el continuo.
 -ella se fue de mi lado ya que creía que era lo correcto, pero jamás me dio una explicación y jamás supe su razón. Yo sé que tenia miedo al amor, pero a mi lado podría haber afrontado todo. No sé que sucedió que le hizo hacer lo que hizo. Necesito buscar, encontrarla y preguntarle porque hizo lo que hizo… también preguntarle si me ama.- explico en susurro Paris.
-¿Tienes alguna pista?-pregunto Kyle.
-Ninguna, lo único que me dijo su mejor amiga que ella estaba tan lejos que ni ella misma podría llegar a ella. Decidí en los últimos meses interceptar una carta de ella y la dirección era de España, pero sin nombre y dirección exacta. Ni siquiera tenia su verdadero nombre-explico frustrado.
Era verdad lo que parís decía, yo siempre mandaba mis carta sin dirección exacta y sin nombre. La ultima carta que le mande a Chalayra era un sobre con un catalogo de vestidos para mi. Ya que necesitaba un vestido para el festival de mascarada.
Suspire a mis adentros al saber que jamás sabría donde yo estaba.
-Nick ya deja de buscarla ya han pasado tantos años…-dijo, pero Paris la detuvo.
-¡Basta!- exclamo parís enojado con su prima-Isabella no sigas con el tema que no soy ningún niño
-Mi hermano el enamorado-se burlo Kyle de parís y el sonrió a media.
-Para mi es un error, te dejo, mejor para ti hay muchas mujeres en el mundo-le dijo Isabella a Kyle.
-Tú nunca has amado-pregunto Paris a Kyle.
-Si-respondió y sus mejillas se encendieron, pero eso es diferente.-yo tengo posibilidades-respondió Kyle sin querer mirarme.
-¿Isabella tu te has enamorado?-pregunto Paris a su prima consentida y ella negó en la cabeza, pero sentí que no decía la verdad ya que evito a Paris con la mirada.- y ¿usted se ha enamorado?-
-Si, dos veces en la vida y jamás volvería hacerlo-dije muy consiente de lo que decía.- me enamore en mi niñez del enemigo de mi padre y cuando era adulta de mi mejor amigo y desde ahí no los he dejado de amar a ninguno de los dos ya que…es complicado mi forma de ama. Yo amo y amo para siempre al igual que si odio te odiare por la eternidad. El amor es algo que no me gusta tocar.-dije pensando que no estaba nadie para escucharme.
-Pues ninguno es quien para juzgarme-salto Paris molesto.
-Yo no te eh juzgado-le dije fríamente sin contenerme.
El mesero se acercó y nos trajo la carta de menú.
Mi estomago estaba al revés y sabia que no podría comer nada a causa de los nervios. París me miraba cuando no miraba el menú.
-¡Él lo sabia!-exclame en mi mente y nadie respondió.
Deseaba un cigarrillo para calmar mis ansiedades.
Tomos pedimos comidas yo solo pedí una sopa de vegetales y mas vodka.
Isabella y Kyle platicaban mientras que Paris y yo solo nos manteníamos en silencio. Yo no sabia de que hablar y mas silenciosa yo estuviera mejor para mi. Los nervios estaba a punto de delatarme y mis ojos esquivaban a los de parís con desesperación
Mis ojos se encontraron una milésima de segundo con los de Paris y ya sentía gana de gritarle a la cara y decirle que era el amor de su vida. La chica de su sueños, pero me contenía. Tenia que… tenia que hacerlo por mi y William.
Mi corazón salto de dolor al escuchar su nombre.
Pero cuando aparte mis ojos de los de Paris, él sonreía de esa forma fugaz y bella que me enamoraba.
-Doctora-me llamo y puse mi atención en el.
-Si-respondí.
-¿Que los cardiólogo hacen? –pregunto.
-Especializarme en el sistema cardiovascular y sus propiedades…-me detuve al ver su rostro.- me especializo en el corazón, la sangre y todo que tenga que ver con el corazón.-dije.-, pero mayormente hago cirugía.
Paris puso cara de horror.
-¿Usted a que se dedica?-pegunte curiosa.
-Soy empresario, me dedico al trabajo familiar- respondió.- soy dueño de hoteles y de empresa de textiles-explico Paris con un tono serio, como si estuviera negociando una acciones conmigo.
-¿Cuanto se piensan quedar?-les pregunto a ambos turistas.
-Unas semanas-respondió Paris tengo que volver en julio para estar con Juliana.
-¿Juliana?- pregunto Kyle.
-Tu sobrina- respondió Isabella.- Nick Adopto a la niña hace 5 años-explico la mujer.
Yo intente controlar mi sorpresa, después de todo era padre. Le daba amor a una niña que necesita amor y cariño.
-¡Acuérdate que son mas de 11 años que no les veía!-exclamo Kyle y los tres se miraron de forma amargada.
Me quede calla intentando no se parte de la disputa familiar.
Nos trajeron la comida y yo comí y bebí en silencio y no fui parte de ninguna conversación. Todo pasó con tranquilidad.
Después de cenar Paris e Isabella se fueron a bailar y yo me quede a solas con Kyle.
-¿Estas bien?-pregunto y negué con la cabeza.
-Me siento cansada-mentí.
-¿Quieres irte?
Negué con la cabeza mi gran mentira.
-¿Quieres ir a bailar?-pregunto y no me codo mas otra razón que aceptar, fuimos a la pista de bailamos y yo seguí llamando la atención de los hombres, lo cual puso de mal humor a Kyle. Bailamos una piza de baile, pero…
-¿Puedo bailar con esta bella dama?-me pregunto un hombre guapo y muy elegante.
-No-respondió Kyle sin dejarme responder.
Me moleste mucho con Kyle ya que se creía como dueño
-¿Es tu novia?-pregunto y yo respondí
-Claro que no y si puedo bailar contigo- respondí de mala gana, solté a Kyle y me fui a bailar con aquel hombre guapo. No hablábamos, pero bailaba de forma cortes y educada, pude notar que tenía la edad de mi papa, pero que no lo aparentaba. Después que la canción termino Kyle me aparto de el bruscamente y me llevo al balcón.
-¿Que te pasa Prince?- le exigí saber molesta.
-¿Porque bailaste con ese vejete?-pregunto alzando la voz.
-Porque me dio la puta gana, quien te crees para decirme que hacer y que no hacer- le espete molesta.
Él me tenía agarrada por el brazo y me lastimaba.
-Suéltame imbécil-le grite y supe que todo el mundo me escucho- aparte mi brazo bruscamente y sin contenerme lo abofetee.-no vuelvas a tratarme como de tu propiedad y que soy tan libre como el aire que entra a tus pulmones.
Me aparte de él y le di la espalada. Salí caminando y siguió caminado. Fui a la mesa.
Tome mi bolso y salí del restaurante dejando a mucha gente murmurando, hombres que sonreían, mujeres que me criticaban, Kyle furioso y parís ni sabia donde estaba con la perra de su prima.
Salí y le pedí las llaves al chico que se había llevado mi auto.
El fui a buscarlo y decidí fumar un cigarrillo.
Lo saque y lo encendí sin perder tiempo, comencé a fumar, pero alguien me toco el hombro.
-Señorita- comenzó parís.- ¿usted esta bien?-pregunto preocupado y asentí, pero en realidad no me sentía así. Quería gritarle a el.-disculpa a mi hermano, tiene un temperamento horrible. Lo saco de mi padre, supongo.- susurro bajito.
Sus ojos estaban fijos en mi brazo.
-¿Te ha lastimado?-pregunto.
-No-mentí
-Déjame ver Sophy-Me dijo y tomo mi brazo para observarlo con determinación.
El tacto de su piel con la mía me gusto, pero no lo demostré ya que era obvio.
Su mano estaba caliente como lo recordaba.
-¡Que idiota!-exclamo para si y nuestro ojos se encontraron-lamento que hayas pasado una velada amargada por nuestra culpa.-se disculpo y yo escuchaba mientras inhalaba la nicotina.
-No es nada- intente parecer indiferente.
Me soltó el brazo y en mi piel se quedo con una quemazón de júbilo.
Nuestras pieles se habían tocado después de tantos años.
El chico trajo mi auto y me toco bocina.
-Me tengo que ir-le dije a Kyle y tire el cigarrillo al suelo sin terminar y lo pise con seducción.
París abrió los ojos como plato.
-¿Ese auto es tuyo?-pregunto y sonreí abiertamente.
-Si, recién nuevo –respondí orgullosa.
-Eres diferente-susurro y lo mire con curiosidad y fascinación.
Sus labios me tentaban con ser besados y mordidos.
Aparte mi vista olvidando ese pensamiento loco.
Ser igual a los demás es aburrido- le dije con una mueca en el rostro.-adiós-me acerque a él y le ofrecí la mano derecha.
París me observo de forma extraña y estrecho su mano con la mía. El contacto fue eléctrico para ambos, pero no duradero. Aparte mi mano de la de él y me fui a mi auto.
Me subí y el chico me serró la puerta.
Baje el cristal y le di un billete de 20 euros de propina. Él lo acepto complacido y yo le sonreí coquetamente.
Conduje a mi casa dejando atrás todo lo que había sucedido con Kyle. En mi mente solo retumbaba el nombre de parís y de nadie mas.
Llegue a mi casa y suspire, estacione el auto y me baje con los pies adoloridos.
Aun no me acostumbraba a usar tacones.
Busque las llaves y abrí la puerta de mi casa, pero cuando me disponía a entrar vi los ojos de alguien mirándome atreves del arbusto.
-Te estoy viendo-le dije y una niña salió del arbusto y después un chico alto también.
La niña tenía el cabello castaño y unos ojos grises, tenía ropa andrajosa y se veía muy sucia. Tenía que tener 11 años de edad.
El chico que salió era mal alto y flaco que la niña, estaba sucio y tenía las mismas facciones que la jovencita.
-¿Porque me espían?-pregunte fingiendo estar molesta cuando estaba curiosa.
-Queríamos verla-respondió el chico con una voz chillona.
-¿Donde están sus padres?-pregunte y ellos no me respondieron.
Volví a preguntar dos veces más y el chico me respondió finalmente al ver que no estaba molesta.
-Mi mama murió cuando éramos chicos y mi padrastro no esta en la casa.-explico.
-¿Desde cuando no comen?-pregunte.
Los chicos se miraron unos a los otros.
-Desde hace 2 días, desde que nuestro padrastro se fue.-respondió.
-¿Desde cuando se mudaron?-pregunte.
-Hace dos semanas-respondió.
Mire a la niña que esta callada.
-¿Ella esta bien?-pregunte y me acerque a ella.
-Ella no habla ni escucha, pero entiende las señas-explico.
Suspire y tuve una idea.
-¿Quieren quedarse hasta que vuelva su padrastro?-pregunte.
Ambos asintieron sin pensarlo.
-Entren-orden y entraron a la casa y yo le seguí. Cerré la puerta.-vayan a la cocina y esperen-ellos obsedieron.
Tome mi celular y llame a Licenciado.
-Hola-saludo amablemente.
-¿Puedes llegar a mi casa?-pregunte.
-Si, pero ¿paso algo grave?-pregunto preocupado.
-No-respondí para calmarlo y le esplique la situación con mis vecinos.
Después de hablar con el colgué el celular y fui a la cocina a preparar algo sin quitarme el vestido q tenia puesto. Prepare macarrones con queso y pechugas de pollo.
Le serví y los dos comieron sin impórtales los modales. Yo me quede atónita y decidí cocinar mas comida, prepare más macarrones con queso y pechugas de pollo, prepare arroz guisado con habichuela y pollo asado. El tiempo se fue volando y ellos devoraron todo lo que yo le servía.
Alguien toco la puerta y fui a ver quien era.
Me sentí tranquila al ver que era el licenciado Baltazar Gautier mi amigo del alma, me consejero y un padre en mi vida. Los años le había venido bien pero ahora tenia mas arugas que antes y canas.
-¿En que te puedo ayudar?-me pregunto el serio.
-Sígueme-le indique cuando el entro y cerro la puerta.-están comiendo-le dije.
El entro a la cocina y vio a los chicos con determinación.
Se sentó frente a ellos.
-Hola mi nombre es Baltazar Gautier soy abogado y necesito hacerles unas pregunta y nada malo pasara. Ambos asintieron y respondieron las preguntas de Gautier y yo aprovecho un instante para cambiarme y ponerme una ropa cómoda. Me puse unos jeans, una camiseta deportiva de color negro y conver’s para sentirme cómoda. Me quite el maquillaje y me quite la joyería y sonreí a mi misma para darme valor en el embrollo en que en que me metía, necesitaba hablar con Kyle y saber su comportamiento.
Salí de mi habitación y me dirigí a la cocina.
Baltazar voy a comprar ropa para los chicos-le dije y le sonreí a ambos- me llamo Sophia Carrión, dígame como quiera.
-¿Te puedo decir Sophy?-pregunto y asentí.
-¿Cuales son sus nombres?-pregunte y el chico respondió:
-Manuel y Federica Colon-respondió y siguió comiendo.
-Vuelvo ya mismo y portasen bien-dije y Gautier me siguió.
Y pregunto en voy baja cuando tomaba mi bolso:
-¿No piensas quedártelos?-pregunto.
-¿Porque no?-pregunte sin verle el problema- tengo una casa grande y comida para mas personas-dije y le di un beso y me fui a comprar ropa en cualquier tienda que estuviera abierta.
Compre ropa que no sabría que si le gustaría, compre lo necesario para esta noche y luego me fui para casa de Kyle.
Ya eran más de la 10 de la noche y supuse que estaría en su casa.
Fui a su casa, estacione el auto y busque la leve debajo de la alfombra.
La introduje y entre sin hacer ruido luego de girar la perilla.
Guarde la llave en mi bolsillo y cerré la puerta.
Subí las escaleras y entre silenciosamente a la habitación de Kyle y mis ojos vieron lo que no debía ver.
Kyle Prince tenía una chica rubia encima de él y ambos gemían de placer. Kyle la miraba con deseo, pero sus ojos se fueron a la puerta y se encontraron con los míos y sin contenerme Salí corriendo.
-Sophia-grito Kyle y aparto a la chica que tenia sobre el y salió corriendo atrás de mi con la toalla tapándose su sexo masculino.
Baje las escaleras corriendo y casi me tropiezo, pero Kyle me sostuvo.
-No me toques- le grite y alguien salió de la cocina.
-Sophy, puedo explicarlo-comenzó, pero no lo deje terminar.
Lo abofetee con la otra mano- no vuelvas a hablarme en tu vida. Gracias por hacerme todo mas sencillo-le escupí cada palabras a grito.
-¿Que sucede?-pregunto Paris con piyamas.
-Nada-le dije a ambos fríamente y parte mi brazo de Kyle.
Me fui de la casa de Kyle sin mirar a tras aun con la llave en mi bolsillo.
Me dirigí a mi casa y controle mi enojo.
No debía estar molesta si Kyle no era mio, pero el y yo quedamos siempre ser sincero si salíamos con otras personas. Esta molesta por que me quiso coger de pendeja.
Estando ya en mi casa, estacione el auto en la cochera, saque las bolsas de compras y las lleve a la cocina.
Los chicos hacían reír a Baltazar y eso me animo mucho.
Me arregle al garganta y notaron mi presencia.
-Hola-saludaron Baltazar y Manuel a la misma vez. La chica me sonrió alegremente.
-¿Se llenaron?-pregunte y asintieron.
-Hora de bañarse-le dije y pusieron malas caras, pero obedecieron.
Luego de bañarlos los observe con ternura y amor.
-¿Donde dormiremos?-pregunto el chico.
-En los cuarto de huésped-respondí ya que mi casa tenia 4 cuartos y 5 baños.
-Dormirás en esa habitación le indique y tu hermana la otra. Tiene colcha y les deje la ropa guarda en el cajo…-dije y el chico me varazo inundándome de amor y cariño.
-Gracias-susurró y yo controle mis emociones.
-Vete a dormir-le dije después que apartar de mi.
El chico obedeció y se fue a dormir, fui al cuarto de Federica y la encontré dormida. Tome la ropa sucia de ella y la bote en la basura y también la de Manuel.
Cuando volvió a la cocina encontré Baltazar sentado en una mesa mientras bebía una taza de te que el mismo se había preparado.
-¿Te vas a quedar con los chicos?-pregunto y asentí cuando me senté a su lado.
-Desde luego que si-respondí.
-Pues estoy es lo que hay que hacer…



















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